Sospecha de síndrome de Hunter
Diagnosticar el síndrome de Hunter puede ser un gran desafío ya que muchos de los primeros síntomas coinciden con molestias frecuentes en la infancia. Esto puede conducir a diagnósticos incorrectos constantemente y una demora para proporcionar el manejo adecuado de la enfermedad.1
Los síntomas que deben generar sospecha de la presencia de síndrome de Hunter incluyen episodios de otitis media y sobrecrecimiento de las amígalas/adenoides de manera repetida, y en combinación con características más específicas del síndrome de Hunter como hernias abdominales, sobrecrecimiento de la lengua y perímetro cefálico grande. Es importante evaluar exhaustivamente los antecedentes médicos del paciente para revisar si hubo un conjunto de síntomas frecuentes del síndrome de Hunter que fueron pasados por alto.1
Si sospecha la presencia de síndrome de Hunter, puede llevar a cabo un examen físico para evaluar la rigidez en las articulaciones, distensión abdominal y los otros síntomas no neuronopáticos de la enfermedad. En los niños mayores, puede evaluar problemas cardíacos, pero también, independientemente de la edad, deténgase y busque los rasgos faciales característicos del síndrome de Hunter.1


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El diagnóstico de síndrome de Hunter en un paciente tiene diversas etapas.
GAG en la orina
El síndrome de Hunter se caracteriza por la acumulación de glicosaminoglicanos, o GAG, que pueden filtrarse en la orina.2
En el síndrome de Hunter específicamente, se puede detectar una cantidad excesiva de los GAG dermatán sulfato y heparán sulfato en la orina y, como consecuencia, un análisis de GAG elevados en orina es generalmente la primera prueba que se realiza en pacientes que podrían tener síndrome de Hunter3 (a menos que ya existan fuertes antecedentes familiares de síndrome de Hunter, en cuyo caso este paso se puede omitir). Un resultado negativo no descarta necesariamente una enfermedad de depósito lisosomal, ya que los niveles de GAG en la orina en pacientes saludables coinciden con los de pacientes que padecen esta enfermedad.3
El análisis de GAG en orina se realiza con ensayos cuantitativos y semicuantitativos, y es el primer indicador diagnóstico de una enfermedad de depósito lisosomal (aunque no específicamente síndrome de Hunter). Si los niveles de GAG no están elevados de forma anormal en pacientes que podrían tener una enfermedad de depósito lisosomal, se recomienda que las muestras de orina también se analicen mediante una cromatografía o electroforesis a fin de identificar cualquier patrón anormal de GAG.2,4
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Las enfermedades de depósito lisosomal pueden elevar los niveles de dermatán sulfato o heparán sulfato en la orina debido a la ausencia de diferentes enzimas lisosomales, incluido el síndrome de Hurler (MPS I) y la enfermedad de Sly (MPS VII).2 2
Por lo tanto, los niveles excesivos o anormales de GAG en la orina no especifican qué trastorno tiene el paciente: es necesario seguir otros pasos para el diagnóstico.2
Los niveles de heparán sulfato por sí solos pueden aumentar con el síndrome de Sanfilippo (MPS III) y los niveles de dermatán sulfato por sí solos pueden aumentar en el síndrome de Maroteaux-Lamy (MPS VI).2
ENZIMA I2S
La característica distintiva del síndrome de Hunter es la deficiencia de la enzima iduronato-2-sulfatasa (I2S), mientras que otras enfermedades de depósito lisosomal ocurren por las deficiencias en otras enzimas.2
Para determinar el síndrome de Hunter, luego de detectar niveles elevados de GAG en la orina, es fundamental evaluar la reducción de la enzima I2S en el cuerpo.2
La I2S generalmente está presente en los lisosomas de todas las células (excepto los glóbulos rojos), por lo que los ensayos de I2S se pueden realizar en fibroblastos, leucocitos, plasma y suero en muestras de sangre.2
Múltiples ensayos de enzimas podrán diagnosticar una enfermedad de depósito lisosomal y una deficiencia de I2S con la presencia normal confirmada de las otras enzimas lisosomales es indicio de síndrome de Hunter.2
IDENTIFICACIÓN DE MUTACIONES
Un análisis genético que identifique mutaciones en el gen IDS confirma un diagnóstico de síndrome de Hunter. Incluso después de que se haya medido una deficiencia de la enzima I2S, una deficiencia de sulfatasa múltiple es aún posible y debe descartarse. Un análisis genético es también la única forma de examinar a portadores de la mutación de síndrome de Hunter (mujeres heterocigotas).2
Se han observado más de 500 mutaciones diferentes del gen IDS y esta variabilidad dificulta la posibilidad de pronosticar síntomas de la enfermedad; no obstante, existe una asociación entre el síndrome de Hunter neuronopático y las mutaciones que producen la ausencia (en lugar de una deficiencia) de la enzima I2S.2
CONSEJO GENÉTICO
La confirmación de síndrome de Hunter con un análisis genético repercute inmediatamente en el paciente y la familia, y, por este motivo, el asesoramiento genético es sumamente importante en el proceso de análisis genéticos. El médico genetista le explica el propósito de un análisis genético a la familia, la causa y los síntomas de la enfermedad y sus consecuencias, incluida la necesidad de atención médica multidisciplinaria y de un examen de selección de la familia para determinar portadores del síndrome de Hunter y otros pacientes que no han recibido el diagnóstico.1
Referencias
- Meikle PJ. Prevalence of lysosomal storage disorders. JAMA 1999; 281(3): 249–254.
- Neufeld EF and Muenzer J. The Mucopolysaccharidoses. In: The Online Metabolic & Molecular Bases of Inherited Disease. McGraw-Hill Medical. DOI: 10.1036/ommbid.165
- Burton BK, Giugliani R. Diagnosing Hunter syndrome in pediatric practice: practical considerations and common pitfalls. Eur J Pediatr 2012; 171(4): 631–639.
- Amartino H. Hunter syndrome (mucopolysaccharidosis II) – the signs and symptoms a neurologist needs to know. Eur Neurol Rev 2015; 10(01): 90–94.
- Scarpa M et al. Mucopolysaccharidosis type II: European recommendations for the diagnosis and multidisciplinary management of a rare disease. Orphanet J Rare Dis 2011; 6: 72.
- Jones SA et al. Mortality and cause of death in mucopolysaccharidosis type II—a historical review based on data from the Hunter Outcome Survey (HOS). J Inherit Metab Dis 2009; 32(4): 534–543.
- Martin R et al. Recognition and diagnosis of mucopolysaccharidosis II (Hunter syndrome). Pediatrics 2008; 121(2): e377–e386.
- Genetics Home Reference. IDS gene. U.S. National Library of Medicine. https://ghr.nlm.nih.gov/gene/IDS#location
- Demydchuk M et al. Insights into Hunter syndrome from the structure of iduronate-2-sulfatase. Nat Commun 2017; 8: 15786.